dedicado a la evolución del alma

ANILLO MAYA DEL MAGO MAGNÉTICO BLANCO

AVALON PSICOLOGÍA Y ESPIRITUALIDAD

Escuela para la Evolución del Alma

 

VESICA PISCIS TOURS

Viajes Sagrados y Conscientes

 

ANILLO MAYA IX HUN

MAGO MAGNÉTICO BLANCO

26 DE JULIO DE 2019 A 24 DE JULIO DE 2020

 

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CALENDARIO Y SINCRONARIO

                                                     Un calendario, del latín calenda, es una cuenta sistematizada del transcurso del tiempo en la dimensión humana y terrestre. Antiguamente, muchos de los calendarios estaban basados en los ciclos lunares. En la actualidad, la mayor parte de los calendarios, sobre todo en occidente, tienen por referencia el ciclo que describe la Tierra alrededor del Sol, por lo que son calendarios únicamente solares.

                                                                  Un sincronario, a diferencia de un calendario solar, registra las trece vueltas que la Luna da alrededor de la Tierra cada año/anillo, mientras el planeta gira alrededor del Sol, la estrella central de nuestro sistema planetario. El Sincronario Maya es un calendario de trece lunas de 28 días cada una, lo que hace un total de 364 días, a los que hay que añadir un día fuera del tiempo: 25 de julio de cada año, para obtener los 365 días con los que nos manejamos según el calendario gregoriano, que es únicamente solar.

                                                                  Así como el aire es la atmósfera del cuerpo, el tiempo es la atmósfera de la mente. Quien es dueñ@ de su tiempo, es dueñ@ de su mente. Cuando somos l@s dueñ@s de nuestro tiempo, conocemos nuestra propia mente y nos sincronizamos con ella (kairós), pudiendo entonces usarla para soñar, crear y manifestar la vida que queremos, participando de paso en la co-creación de la vida en general.

                                                                  La Ley del Tiempo, descubierta por José Argüelles, es la puerta de entrada a la cuarta dimensión y, a partir de ella, al resto de dimensiones de vibración energética elevada y, por consiguiente, de una conciencia más amplia y profunda, de una conexión de orden superior con las energías de luz, sabiduría, amor y resto de cualidades divinas.

                                                                  Sin embargo, para poder cruzar esa puerta y beneficiarnos de todo cuanto hay más allá de ella, primero hemos de situarnos fuera del tiempo cronológico y colocarnos en el tiempo universal, ese que está dirigido por el Espíritu, por la Mente Divina, por la Fuente de todo lo creado, y que nos conecta con todo cuanto existe en todas partes, liberándonos de la separación y posicionándonos de nuevo en la unidad. El tiempo cronológico es el tiempo de la personalidad terrestre, mientras que el tiempo universal es el tiempo del alma, el tiempo en el que todo sucede a la vez y que nos mantiene siempre en la eternidad del ahora, el único momento que en verdad existe y el único en el que podemos hacer cosas, tanto para sanar y dejar marchar nuestro pasado, como para construir un presente mejor y, con él, un futuro más prometedor, luminoso, próspero y lleno de amor.

                                                                  Los sincronarios, como he dicho más arriba, son calendarios de trece lunas (meses), de veintiocho días cada una, una idea de medir el tiempo que no es nueva en absoluto. Los druidas y las druidesas, por ejemplo, usaban un calendario árbol, que tenía esas características, más un día que quedaba fuera de cuenta, al igual que l@s incas, l@s mayas, l@s egipci@s antigu@s, l@s polinesi@s y l@s indi@s Lakota. Se les llama Calendarios Lunares porque están basados en el ciclo menstrual de las mujeres, que tiene una duración de veintiocho días, como el ciclo de la Luna, regente tanto de dicho ciclo como de los partos y de las mareas, entre otras muchas cosas.

                                                                  La perfección matemática del Sincronario de Trece Lunas queda patente en la ecuación siguiente: 1 + 2 + 3 + 4 + 5 + 6 + 7 = 28. Cada semana tiene siete días, igual que en nuestro actual calendario pero, a diferencia de éste, todas las lunas o meses tienen cuatro semanas invariablemente, siendo cincuenta y dos el total de éstas. Además, cada semana tiene un propósito básico, que se desarrolla en cada uno de sus siete días de existencia. La Luna gira alrededor de la Tierra trece veces a lo largo de un año: 13 x 28 = 364 días, cifra a la que debemos añadir un día, para obtener los 365 días de que consta cada anualidad. Con esta manera de medir el tiempo, todos los años permanecen constantes. En el Sincronario Maya, la primera luna, la primera semana de ésta y el día de año nuevo, por utilizar esta expresión tan familiar para todos los pueblos, siempre comienzan el 26 de julio, a las cero horas, siendo el último día del año el 24 de julio siguiente. Así, el 25 de julio, queda fuera del tiempo y es una jornada para celebrar y reflexionar sobre el año recién terminado. También se aprovecha para dar la bienvenida al que comenzará a continuación, además de soñar y proyectar nuestros propósitos y objetivos para ese nuevo anillo, para esa nueva vuelta del ciclo, tanto en el plano puramente material y terreno, como en el personal, evolutivo y espiritual.

                                                                  El Sincronario de Trece Lunas es una herramienta para armonizarnos con la galaxia, así como un instrumento para llevar a la práctica y materializar la Ley del Tiempo. Al ser armónicamente perfecto, produce efectos muy beneficiosos en todos los ámbitos: físico, mental, emocional, energético y espiritual, tanto individual como colectivamente.

                                                                       El Sincronario de Trece Lunas es un sistema perpetuo, que no necesita modificaciones, como sucede con el calendario gregoriano.  Está basado en la frecuencia 13:20 y sincronizado con el giro galáctico de 260 unidades, agrupadas en el Tzolkin o Cuenta Sagrada Maya, proveniente de Hunab-Ku: la Energía Creadora Universal, el Movimiento y la Medida, el Gran Espíritu, el Centro de todos los Centros, que nos hace regresar al Centro de todo lo que Es, Aquél cuyo nombre se dice suspirando y que reúne todas las características y cualidades de cuanto existe, tanto femeninas y receptivas como masculinas y activas.

                                                                  El número 13 es el Poder del Movimiento, la vibración de la liberación, la sutilidad del espíritu que reina sobre la materia y la llena de vida. Hay trece lunas, trece tonos galácticos y trece articulaciones principales en nuestro cuerpo. El número 20 es el Poder de la Totalidad, el Camino de Iniciación que l@s mayas nos legaron para que conociéramos las cualidades de nuestro ser. Hay veinte sellos mayas y veinte son también los dedos que tenemos entre nuestras manos y nuestros pies. El Tzolkin contiene por tanto el más importante de los legados mayas: El conocimiento sobre el Universo que es, en definitiva, el conocimiento de nosotr@s mism@s, puesto que como es arriba, así es abajo; como es en el Macrocosmos, así es en el microcosmos. Dicha cuenta sagrada está codificada como una matriz de 260 unidades, siendo su esencia mantenida por un conjunto de combinaciones de veinte sellos solares, símbolos o arquetipos, y de trece números o tonos.

                                                                  La perfección armónica mencionada más arriba, se centra en el día 365 de cada año, llamado Día Fuera del Tiempo, un día de libertad galáctica, de armonización y de comprensión universal, que tiene como propósito principal celebrar la vida como arte y la paz a través de la cultura. En numerosas culturas y países, como por ejemplo la egipcia, el día 25 de julio era una jornada festiva e importante del ciclo anual. Con el paso del tiempo y, sobre todo, con las modificaciones que la religión católica fue haciendo de las festividades relacionadas con los ciclos naturales, quedó establecido como día de culto a determinados santos, como el Apóstol Santiago en España. Modificaciones posteriores, especialmente interesadas en dejar a un lado lo espiritual y mezclándolo exclusivamente con lo religioso, eliminaron esta festividad del calendario, que sólo se mantiene ocasionalmente.

                                                                  La Tierra gira alrededor del Sol y, al dar la vuelta, forma un anillo solar con cada órbita. Usando la medida correcta del tiempo, con el sincronario de trece Lunas de 28 días cada una, podemos hacer consciente el anillo solar. Aceptar este sistema para medir el tiempo y regirnos por él, aun manejando también el calendario gregoriano, es un acto de sanación para la Tierra, al tratarse de un mecanismo cósmico que crea una frecuencia similar a la frecuencia solar. Sintonizarnos y vibrar con esta frecuencia, da como resultado una amplificación de la conciencia, que es la llave maestra para nuestro viaje evolutivo por la Vida en la nave Tierra en esta ocasión.

                                                                  Esa sanación no es sólo para la colectividad, también lo es para cada una de las individualidades que sincronizan con esta forma de medir el tiempo, beneficiándose de las múltiples ventajas que ocasiona y permitiendo un contacto muy estrecho y práctico con las energías de cada día, de cada Luna, de cada semana y de cada anillo, algo que el calendario gregoriano no nos proporciona. No podría hacerlo, puesto que se trata de una forma artificial de medir el tiempo, en la que tampoco hay una relación de continuidad entre unos meses y otros o entre los diferentes días y semanas de estos. De este modo, queda fuera la conexión con toda la galaxia en la que existe el sistema solar en el que orbita el planeta Tierra y, con ella, el contacto con la esencia y el centro de lo que realmente somos.

                                                                  El Sincronario de Trece Lunas permite recuperar y reactivar ese contacto, a la vez que nos proporciona una excelente herramienta para manejarnos aquí, en la dimensión terrestre, con la que indudablemente hemos de convivir en cada encarnación como seres humanos, a la vez que nos ayuda a recordar que no es de este plano de donde somos, sino del plano de lo divino y de lo cósmico. Por lo tanto, y doy fe de ello con mi propia experiencia, son perfectamente compatibles la forma Maya de medir el tiempo y la forma gregoriana hasta que, en el momento oportuno, ésta sea derogada por completo para que, en su lugar, esa otra forma de pensar, sentir, medir y vivir el tiempo se manifieste.

 ANILLO MAYA 2019-2020: MAGO MAGNÉTICO BLANCO

                                                                  El viernes 26 de julio de 2019, comienza el ANILLO MAYA MAGO MAGNÉTICO BLANCO, cuya energía y esencia nos acompañarán hasta el jueves 24 de julio de 2019.  En el sello con el que comienza este nuevo anillo, nos encontramos con tres aspectos importantes a tener en cuenta, tanto en ese primer día como a lo largo de todo él, puesto que serán las energías en las que estará enfocado todo el anillo. Dichos aspectos son la energía del propio sello: MAGO, la energía de su tono: UNO y la energía de su raza: BLANCA. Veamos ahora cómo influirán estos tres poderes a lo largo de sus 364 días de existencia:

 SELLO MAGO

                                                                  El SELLO MAGO tiene que ver con la atemporalidad y con vivir la consciencia del presente, el único momento del tiempo que en verdad existe y el único en que podemos hacer cambios reales y efectivos, tanto para estar bien en el aquí y el ahora como para estar mejor en el futuro. También se relaciona con la integridad, el conocimiento y el reconocimiento del corazón, la alineación con la voluntad divina y cósmica, la magia chamánica, alquímica e iniciática, el jaguar, la sacerdotisa/el sacerdote, la/el vidente nocturn@.

TONO UNO

                                                                  El TONO UNO es el Principio Magnético de Unidad. Es el tono que unifica e identifica tanto el propósito como la meta, manteniendo también la unidad de acción en torno a ese propósito. Es también magnético, porque atrae información y energía para proponer metas, estableciendo intenciones realistas y que, por lo tanto, pueden ser realizables y alcanzables. También tiene la capacidad de integrar todos los aspectos del ser. Quienes nacen con el tono uno en su firma galáctica, tienen como principal tarea ser ell@s mism@s, en su mejor versión y desplegando su más alto potencial. No se trata de ser un@ mism@ de cualquier forma y sin transformar lo que sea necesario, sino de ser lo que verdaderamente se es y expresarlo en el mundo de la humanidad y la materia. Estas personas, gracias a su capacidad para conocerse y expresarse, son líderes naturales por excelencia, a través de propuestas en las que la unidad de acción es un factor determinante.

 RAZA BLANCA

                                                                  La Raza Blanca, a la que pertenece el sello MAGO, es la encargada de refinar. La dirección relacionada con esta raza es el Norte y el elemento de la naturaleza con el que sincroniza es el aire. Su punto de vibración más alto es a media tarde. La dualidad de la raza roja es humildad/soberbia. Además del sello Mago, pertenecen a la raza blanca estos otros sellos: Ik: Viento, Cimi: Enlazador de Mundos, Oc: Perro y Etznab: Espejo.

                                                                  El anillo del MAGO MAGNÉTICO BLANCO da comienzo, y hace posible, una importante reorganización de la consciencia, re-encantando y recreando el mundo, llevándolo a una frecuencia vibratoria más alta, aceptando primero humildemente lo que hay, y refinando después todo lo que sea necesario y posible. Su lema y meditación es: Encanto la atemporalidad, uniendo y atrayendo el propósito. Así que será un anillo para estar plenamente centrad@s en el presente, el momento del tiempo que nos transporta hacia la atemporalidad, es decir, al estado fuera del tiempo en el que, paradójicamente, todas las posibilidades y todos los tiempos existen al unísono: pasado, presente y futuro.

                                                                  Estar presente no sólo tiene que ver con el tiempo cronológico. También se trata de estar presente en un@ mism@, de estar centrad@s en nuestra esencia, sin permitir que nada ni nadie influya tanto en ese estado, que nos dejemos llevar por esa influencia y nos salgamos de ese centro interior esencial. Cuando estamos en esa posición, plenamente conscientes y atent@s a todo cuanto sucede dentro y fuera de nosotr@s mism@s, el universo entero se despliega ante nuestra visión y podemos escoger, de entre la infinidad de posibilidades a nuestro alcance, qué queremos ver materializado en nuestra vida para, posteriormente, ponemos en camino de conseguirlo y hacerlo realidad, empleando el tiempo, el trabajo y la perseverancia que sean necesarios, a la vez que nos mantenemos alegres, contentos, llen@s de amor y liger@s de equipaje, como cuando éramos niñ@s y creíamos que podíamos llegar hasta el infinito y más allá. Tal vez, en una única vida, no podamos alcanzar ese infinito, pero seguro que en cada una de ellas, siendo conscientes y permaneciendo despiert@s, podremos acercarnos mucho. También será un año importante para la receptividad de pistas, señales y mensajes, puesto que el arquetipo del Mago permite una conexión permanente y fluida con las energías de inteligencia superior. Asimismo facilitará tener muy claros nuestros propósitos, acercándonos aún más a la unidad del universo y de todo cuanto nos rodea, elevando nuestra vibración y expandiendo nuestra conciencia más profundamente a cada paso que damos, manteniendo nuestra capacidad evolutiva y transformadora.

 ONDA ENCANTADA DEL ANILLO MAGO MAGNÉTICO BLANCO

                                                                  Una Onda Encantada es un proceso que se lleva a cabo en trece fases. Es como una escalera con trece peldaños, que han de ser caminados en todo lo que hacemos, tanto si se trata de todo un anillo como si se trata de un espacio de tiempo corto o una situación concreta por la que hay que pasar. La Onda Encantada es, por lo tanto, una constante de trece unidades secuenciadas en el tiempo y estrechamente relacionadas entre sí porque, como en las escaleras del plano terrestre, para llegar a un peldaño, primero hemos de alcanzar el inmediatamente anterior. La Onda es el Poder del Movimiento y va unida de manera inseparable a todos los hechos, tengan estos la duración que tengan en el tiempo: desde unos pocos minutos hasta un anillo entero, pasando por días, semanas, lunas… El término Encantada tiene que ver con el Poder de la Armonía, que ha de estar presente en todas nuestras relaciones energéticas con el mundo, a través de las pulsaciones de todas las dimensiones, además de estar también en sincronía con nuestra auténtica realidad porque, de no ser así, tampoco podríamos estarlo con cuanto nos rodea. Juntos, los trece Tonos Galácticos de la creación forman la Cosmología del Movimiento establecida por el pueblo maya.

                                                                  Los Tonos Galácticos reflejan, en síntesis, los trece poderes de la creación, relacionados siempre entre sí. Son energías galácticas procedentes de Hunab Ku: el corazón interdimensional de nuestra Galaxia, y nos indican el grado de elevación de la vibración energética, repitiéndose cíclicamente de manera ininterrumpida, cada trece días, en secuencias de Trayectorias Armónicas u Ondas Encantadas. Cada secuencia de trece tonos forma una trayectoria armónica u onda encantada, representando cada tono, por lo tanto, una secuencia cosmológica que describe un proceso de creación permanente. Cada uno de los tonos tiene asignado un Nombre, una Acción y una Esencia, que le confiere su particular cometido, esencia y energía dentro de todo el proceso.

                                                                  El anillo MAGO MAGNÉTICO BLANCO, comienza con la ONDA ENCANTADA DEL MAGO, así que el primer proceso de trece pasos de todos sus días, también estará presidido por su energía. Los trece sellos solares de dicha onda encantada son los siguientes:

 

 

  1.      Ix Hun: Mago Magnético Blanco: Encanto la atemporalidad, uniendo y atrayendo el propósito. Primer día del Anillo Maya 2019-2010.
  2.     Men Ka: Águila Lunar Azul: Creo la visión de un mundo mejor, polarizando, igualando y aceptando el desafío.
  3.        Cib Ox: Guerrero Eléctrico Amarillo: Cuestiono la inteligencia, sirviendo, activando y uniendo.
  4.     Kaban Kan: Tierra Auto-existente Roja: Evoluciono la navegación, midiendo, dando forma y tomando medidas.
  5.       Etznab Ho: Espejo Entonado Blanco: Reflejo el sin fin, comandando, confiriendo podere y dando esplendor.
  6.        Cauac Uak: Tormenta Rítmica Azul: Catalizo la autogeneración, organizando, igualando y equilibrando.
  7.        Ahau Uuk: Sol Resonante Amarillo: Ilumino el fuego universal, inspirando, canalizando y armonizando.
  8.        Imix Uaxac: Dragón Galáctico Rojo: Nutro el nacimiento, creando integridad, igualando y equilibrando.
  9.        Ik Bolon: Viento Solar Blanco: Comunico el espíritu, pulsando y realizando la intención.
  10.       Akbal Lahun: Noche Planetaria Azul: Sueño la abundancia, manifestando, produciendo y perfeccionando.
  11.       Kan Buluk: Semilla Espectral Amarilla: Atino el florecimiento, divulgando, liberando y disolviendo.
  12.     Chuen Lahak: Serpiente Cristal Roja: Creo y hago vivir la fuerza vital, dedicando, universalizando y cooperando.
  13.      Cimi Oxlahun: Enlazador de Mundos Cósmico Azul: Igualo la muerte y la vida, perdurando, estando presente y trascendiendo.

 ORÁCULO DE LA QUINTA FUERZA DEL 26 DE JULIO DE 2019

                                                                  El Oráculo del Destino, también llamado Fractal y de la Quinta Fuerza, es un patrón base que marca el destino, en sentido de propósito y finalidad, de la vida de una persona, un anillo, un acontecimiento… Está formado por cinco sellos, cada uno con su poder, esencia y energía especiales. Aplicado a las personas, el Oráculo de la Quinta Fuerza nos permite conocer los cinco poderes que nos acompañan a lo largo de nuestra vida y que, en relación con los anillos, nos acompañan a lo largo de sus 364 días de vida. Esos cinco poderes permiten un mayor entendimiento y una mejor comprensión de la relación existente en todo cuanto nos rodea. Son las energías compañeras que están a nuestro lado en el viaje del tiempo de cuarta dimensión, en lo individual y en lo colectivo.

                                                                  El Oráculo del Destino para el 26 de julio de 2019, primer día del ANILLO MAYA MAGO MAGNÉTICO BLANCO, está representado en esta figura:

 

 

 

                                                                  Los sellos que aquí aparecen son los siguientes:

 

  1. Sello del Destino. Es el sello que está en el centro del oráculo y que corresponde siempre al día de nacimiento. Es la base del oráculo. En el contexto de este escrito, es el día en que empieza o nace el anillo solar Mago Magnético Blanco, que en maya es Ix Hun. El lema de este sello es: Encanto la atemporalidad. Su número es el 14.
  2. Sello Análogo.  Es el sello que está a la derecha del Kin Destino y el que le sigue en la secuencia del sincronario, reforzando su energía y su poder. Aquí es el sello Chuen: Serpiente Roja, cuyo lema es: Creo y hago vivir la fuerza vital.
  3. Sello Guía. Es el sello que está por encima del Kin Destino, pertenece siempre a la misma raza que éste, en este caso la blanca, fortaleciendo la energía de dicha raza. De nuevo aparece Ix, el mismo sello que el de destino, por lo que su poder y energía quedan duplicados.
  4. Sello Antípoda. Es el sello que está a la izquierda del Kin Destino, oponiéndose a él y desafiándolo para fortalecer la reconstrucción de la memoria. Aquí es el sello Kan: Semilla Amarilla, cuyo lema es: Atino el florecimiento.
  5. Sello Oculto. Es el sello que está debajo del Kin Destino, representando los factores inesperados y escondidos, esos con los que no se cuenta y en los que, habitualmente, reside el mayor potencial para la expresión del sello destino. Aquí es el sello Manik: Mano Azul. El lema de este sello es: Conozco la sanación y la realización.

 

                                                                  Todas estas energías se manifestarán de una forma nueva a como lo han hecho hasta ahora, puesto que el tono uno favorece y propulsa los nuevos comienzos, que siempre parte de lo conseguido con anterioridad, abriendo nuevas formas de sanación y conocimiento, nuevas maneras de cumplir los objetivos, fuerzas vitales nuevas, nuevos sistemas para crear, soñar y materializar esos sueños y creaciones.

                                                                  La síntesis del Oráculo de la Quinta Fuerza, que da salida al nuevo anillo y cuyas energías estarán presentes todos los días de su existencia, es la siguiente:

 

Unifico con el fin de encantar

Atrayendo la receptividad

Sello la salida de la atemporalidad

Con el tono magnético del propósito

Me guía mi propio poder duplicado

 

 

¡¡¡FELIZ ANILLO MAYA DEL MAGO MAGNÉTICO BLANCO PARA TOD@S!!!

 

IN LAK’ECH: YO SOY OTRO TÚ

HALA KEN: TÚ ERES OTRO YO

 

 

María Sánchez-Villacañas de Toro

Colegiada M-02604

 

AVALON PSICOLOGÍA Y ESPIRITUALIDAD

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Sanación. Registros Akáshicos

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© Texto e imágenes: María Sánchez-Villacañas de Toro (24-VII-2019). Todos los derechos reservados